El trabajo publicado en la revista Acta Zoológica Lilloana, serie periódica de Fundación Miguel Lillo, da cuenta de la presencia del Hippocampus patagonicus, en el estuario externo del río Negro.
El orden Syngnathiformes Syngnrathidae incluye peces aguja y caballitos de mar, constituyéndose Hippocampus el único género que reúne a éstos últimos. Presentan una distribución global en zonas tropicales y templadas siendo la población más cercana y documentada la ubicada en la Bahía de San Antonio, en el Golfo San Matías de la provincia de Río Negro. En el orden mundiial, los caballitos de mar fueron clasificados como especies vulnerables por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Según los valores obtenidos para los caracteres morfométricos, el ejemplar hallado varado en la costa de la desembocadura del Río Negro correspondería a una hembra de pequeño tamaño. El registro resulta de relevancia debido al estado de vulnerabilidad de esta especie -su población en la Bahía de San Antonio ha disminuido en un 90% durante los últimos 30 años-, por lo que resulta fundamental intensificar los estudios en la zona para establecer si se trata de un registro eventual o existe una población estable en dicha área de estudio.
El Hippocampus patagonicus presenta características únicas que los diferencian claramente del resto de las especies: una postura erguida, ausencia de escamas y de aletas pélvica y caudal, una cola prensil, un hocico tubular rígido desprovisto de dientes, y un esqueleto altamente modificado formado por placas óseas, anillos y crestas longitudinales. Asimismo, presentan dimorfismo sexual, el macho adulto posee una bolsa incubadora ventral en la que la hembra deposita sus huevos.
Entre las principales amenazas a las que se enfrentan se encuentran la pérdida y degradación de hábitat, la captura incidental, y la pesca dirigida, debido a su demanda ornamental para acuarios, venta como souvenirs, uso para medicina tradicional en países asiáticos y fines religiosos
Para ver el artículo completo de la Dra. Andrea Tombari publicado en la revista, acceder aquí.
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